lunes, 5 de julio de 2010
El lado oriente de Tuxtla amaneció con neblina, toda la ciud... on Twitpic
El lado oriente de Tuxtla amaneció con neblina, toda la ciudad muy fresca.
sábado, 19 de junio de 2010
I've lost my muchness
He perdido mi muchosidad.
Luego de una imprudente tarde de cine con mi amiga Yaya (viendo Cartas a Julieta - Ñoña recomendación, pero tienen que verla por las locaciones), me descubrí sola en casa. Entre las ociosidades que la soledad te permite, opté por revisar posts viejos de este blog.
No sé por qué razón me hice de este espacio, fue en 2004 cuando me suscribí. En aquel entonces no era necesario tener una cuenta Google, a pesar de que ya eran la misma melcocha. Esto fue uno de varios de mis extraños pininos en el internet, más allá de Latin Chat y Messenger. Pero bueno, ahí estuvo mi pobre blog, casi cuatro años en el abandono. Para 2008 ya le había encontrado el gusto a esta bitácora. Nunca fui una de esas niñas que coleccionaban pilas de románticos diarios, apenas pude llenar la mitad de uno a los 9 años, pero eso fue todo. Así que aquí estaba yo, a los 23 con una pasada euforia por el fotolog y redescubriendo la habilidad para "escribir".
Subí algunas notas, curiosidades de la ciudad donde vivo, choros catárticos y uno que otro berrinche. Y a pesar de sus imperfecciones, esos textos eran YO. Esa esponja llena de vida y aire que recuerdo era en mis años de preparatoria, se colaba entre los renglones. No era una profesionista, estaba llena de dudas y boberas (no acepto comentarios respecto a esto jeje), pero también tenía mi muchosidad.
Hace poco, cuando vi a la Alicia de Burton en el cine, un balde de agua fría me cayó encima. El sombrerero, que me recuerda a cierto caballero cuyo nombre no quiero mencionar, le dice a Alicia: "You were much more muchier (then)...You've lost your muchness." Y ¡juaz! Me mató. Me di cuenta de la triste verdad: Perdí mi muchosidad.
Ya no escribo lo que pienso, sino lo que se me encarga. He estado leyendo más, eso no me lo puedo reprochar; pero escribiendo no.
Y descubrí mi cabeza llena de tantas cosas, mi boca enojada por no hablar, mis lapiceros y lápices en algún lugar de mi bolsa o mi cuarto protestanto por el olvido. Mis pasteles y colores refunfuñando su suerte en un cajón del closet. Ya ni un dibujo, no digamos un texto. Y la cámara fotográfica me la mienta de cuando en cuando. ¿Qué le pasó a mi muchosidad? Tenía mi chiste, eso nadie me lo quita. Pero ¿y ahora?
A veces siento que Peter Pan tenía razón, no debemos crecer. Pero luego se me viene este sentimiento parecido a la responsabilidad y me pone los pies en la tierra. Ya estoy vieja. Quizá mi subconciente malinterpretó esta premisa y la convirtió en un mantra negativo. No estoy vieja para mal, sino para bien, para madurar. O en cristiano moderno: ubicatex.
Las deudas, la presión, la voracidad, la pereza, los compromisos, el miedo, la soledad, la indiferencia, la negación, la inocencia estupidizada, la dependencia... Un autocomplot.
A pesar de todo, voy a recuperar mi muchosidad. ¿Y tú?

Etiquetas:
comunicación,
fun,
life,
muchness,
muchosidad,
sentimientos,
tuxtla,
vida
sábado, 5 de junio de 2010
Y más libros
Otros dos traumas literarios.
Primero "El ladrón de días" de Clive Barker. Recomendado y "enjaretado" por el Signo de la Espada ¬¬' comencé a leer este librito con malas expectativas pero al final me quedó un buen sabor de boca. Aunque parece un cuento infantil, uno cae en la cuenta de que es para niños y no tan niños, de que es todo menos infantil.
A falta de la portada española les dejo ésta que me encontré por ahí, ligada a su respectiva URL de descarga.
El segundo trauma es "Los Magos". Bue, ¿qué decir? Terminé enojada!!!! Y no porque el libro sea tan malo, ni porque se plagie descaradamente los rudimentos de Narnia. Finalmente fue una sátira de los clásicos cuentos de magia e iniciación. Lo que me pasó es que me metí tanto en la historia, que me terminé identificando con mucho de la cotidianeidad de los personajes centrales. Frustaciones, enojos y miedos incluídos por supuesto. Léanlo bajo su propio riesgo.
También pongo la portada con su respectivo URL del primer capítulo.
Y un trauma musical.
El OST de "El Príncipe de Persia". Los ritmos de medio oriente siempre son muy pegajosos, mezclados con la voz de Alanis en la pista de los créditos de la movie fueron lo mejor. (Mmm, lo segundo mejor después de Jake Gyllenhaal, jaja)
Bueno, nos leemos luego ;)
Etiquetas:
cine,
Clive Barker,
comunicación,
culture,
fantasy,
fun,
Ladrón de días,
Lev Grossman,
libros,
Los Magos,
music,
Prince of Persia,
Príncipe de Persia,
recomendaciones,
Soundtrack
viernes, 26 de marzo de 2010
El Nombre del Viento
Bueno, este librito me tiene ahora fascinada. Me encanta Kvothe, siento que me he enamorado de él jajaja (cuándo no?), la trama es una típica iniciación del héroe a través de un tormentoso camino que la cruel vida le prepara. Tiene altas y bajas, no es ni bueno ni malo... es muy humano y eso me gustó. A fin de cuentas, este libro es sólo la primera parte de una trilogía, lo que aquí se narra son los primeros años de vida de Kvothe, así que en teoría lo mejor está aún por venir.
Les dejo aquí el primer capítulo tomado de la página oficial del libro. Dios bendiga el cerebrito de Patrick Rothfuss.
miércoles, 16 de diciembre de 2009
Dolor de corazón

Cuando abro nuevamente los ojos veo a Nana a mi lado, las dos recargadas contra un árbol. Frente a mí está él... de espaldas, interponiéndose entre la jovencita y nosotras. - ¡Ya se despertó esa traidora, suéltame. La mataré antes de que se de cuenta de lo que ha pasado! -
Con horror mi mente reconoce ese timbre de voz, ahora con cuatro años más encima, pero es ella. La dulce Jenny que yo dejé de 10 años, es ahora una jovencita... una mujer que quiere matarme...
Entonces lo escucho de nuevo y siento esa tibieza en mi pecho - ¡Tienes que calmarte! Debemos esperar a que nos pueda responder, esta traidora no estará aquí sin alguna razón y debemos averiguar qué quiere. - La felicidad me abandonó antes de llenarme por completo... ¿Por qué me llama traidora?
Etiquetas:
Forest,
Marian,
Robin Hood,
Sherwood
jueves, 16 de julio de 2009
Regreso ¿a casa?
Antes de tener conciencia de lo que nos pasó, este dolor punzante que perfora mi cabeza me obliga a abrir los ojos. Sólo veo pasto y rocas. El bailoteo de luz que producen unas antorchas detrás de mí apenas me permiten ver esas dos siluetas; son una pareja de jovencitos desaliñados.
Mis ojos aún no enfocan en la penumbra, pero buscan desesperados a Nana. No quiero moverme, ellos están armados y a mí me quitaron la espada.
Se ven realmente jóvenes, ella vestida de azul con ropajes de hombre, y él con un gorro oscuro que me resulta familiar. Murmuran algo, pero hablan tan aprisa que no entiendo nada. De pronto ella se agita, recoge una vara de roble que tenía recargada en una piedra y corre hacia mí gritando "¡es una traidora!". Entonces, cuando creía ya sentir los golpes, un grito nos detiene a todos... detiene hasta al viento - ¡Jenny! - resonó en la oscuridad. Yo tirada semi inconciente, pero con una ola cálida que me cubre el pecho... esperanzada y feliz de oirle de nuevo.
Trato de levantarme, pero mi mente se pierde otra vez.

Suscribirse a:
Entradas (Atom)
...nuestro himno
BLEACH
¿A qué división Shinigami perteneces? |
![]() 13th Division Take this quiz! |